LAS INFRAESTRUCTURAS TECNOLÓGICAS, EL TURISMO Y LA INDUSTRIA, EN EL CORAZÓN DEL DEBATE SOBRE EL FUTURO DE BARCELONA METRÓPOLIS
Os proponemos un extracto de los artículos de Josep Grau, Jordi William Carnes y Núria Oliveras publicados en 2022 sobre algunos de los temas clave de la actualidad metropolitana
LA APUESTA POR LAS INFRAESTRUTURAS TECNOLÓGICAS
Por Josep Grau, consultor de estrategia y tecnología
La posición geoestratégica que Barcelona en el Mediterráneo le permite convertirse en un centro neurálgico para ser un importante punto de interconexión de cables submarinos en Europa. Barcelona Cable Landing Station (BCLS), liderado por la empresa catalana AFR-IX Telecom, está construyendo en Sant Adrià de Besòs la más grande infraestructura de cable submarino del Mediterráneo, una estación de aterrizaje de alta capacidad en Barcelona.
Esta infraestructura será la primera estación internacional de aterrizaje de cables submarinos construida en Cataluña, la instalación operará como gestor independiente en regimiento de alquiler. El modelo neutral, que explotará AFR-IX, es un modelo innovador de acceso abierto, que facilita la libre competencia entre los grandes operadores.
Barcelona CLS es la mejor alternativa frente a otras alternativas, como la que quiere ofrecer la nueva estación en la ciudad de Génova. La de Barcelona nos permitirá descongestionar el tráfico que pasa por Marsella. La infraestructura francesa da servicios a 10 cables submarinos y en proceso de obtener los permisos de aterrizaje de 12 más, por lo que es estratégico disponer de la estación de Barcelona.
El próximo año está previsto la entrada en funcionamiento en Barcelona de la Medusa Submarine Station, una nueva infraestructura de comunicación submarina que será referente en el Mediterráneo.
Un proyecto liderado también por la compañía AFR-IX, que desplegará desde la Barcelona Cable Landing Station, con una inversión de 326 millones de euros, financiado una parte por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) con 163 millones de euros.
Medusa será el cable submarino de fibra óptica más largo del Mediterráneo. Son unos 8.700 kilómetros, conectando nueve países de África y Europa, con puntos de aterrizaje en Portugal, Marruecos, España, Francia, Argelia, Túnez, Italia, Grecia y Egipto. El primer tramo de esta infraestructura será desplegada para la compañía Alcatel Submarine Networks y comenzará a funcionar en 2024 uniendo Barcelona con Lisboa y Marsella.
Lee el artículo entero aquí.
TURISMO NUEVOS TERRITORIOS, MÁS GESTIÓN
Por Jordi William Carnes, Presidente de la Fundación KIMbcn
El nuevo reto en cuanto al turismo es la gestión. Coordinar oferta y demanda en una perspectiva amplia y transversal. Crear una cultura operativa requiere tiempo y determinados apriorismos ideológicos como el de «turista marcha a casa» no ayudan. Combinar la formación de los trabajadores y la estabilidad laboral que ayude a mejorar la calidad del destino junto a una coordinación cotidiana, práctica y operativa entre los actores públicos y privados es imprescindible, y esencial para dignificar a todos los actores. Para prestigiar una industria muy transversal. Sabemos que un cliente insatisfecho es una rémora para el destino por ello sería oportuna una redistribución diferente de las tasas turísticas, (las ofertas culturales y potenciar nuevos territorios con nuevas actividades son una oportunidad).
La sostenibilidad del turismo pasa por hacer de ésta una actividad resiliente, no estigmatizada. Que los actores públicos ayuden, no dificulten que las inversiones privadas generen infraestructuras más eficientes y eficaces. En la perspectiva de una economía circular y el desarrollo de la innovación tecnológica. Las moratorias sin un consenso territorial amplio generan dinámicas contradictorias.
Para generar un turismo de calidad y sostenible en el tiempo y territorio es necesario generar complicidades que erradiquen toda forma de incivismo e inseguridad. Es necesaria la gestión de ciertos cambios normativos para hacer fácil el cumplimiento de las legalidades vigentes.
Las buenas prácticas son la hoja de ruta para todos los actores, pero seamos sinceros, no podemos prescindir del turismo, con las capacidades laborales y formativas que tenemos, no tengamos miedo, ya que el turismo es una oportunidad. Sobran malas y especuladores, necesitamos buenos profesionales, y como dicen las «meigas» «haberlas las hay».
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LA INDUSTRIA EN LA REGIÓN METROPOLITANA DE BARCELONA
Núria Aymerich, Secretaría General del Gremio de Fabricantes de Sabadell
Hoy la región metropolitana de Barcelona tiene una industria sólida, cada vez más limpia y más sostenible, que ocupa conocimiento y crea oficios. Nos hacen falta programas formativos adaptables a las necesidades de las empresas con prácticas en el centro de trabajo y actualizar de forma ágil los programas formativos, en buena parte todavía pensados y ubicados en lugares que responden a las necesidades de otras épocas.
No somos una simple periferia de una capital global, somos la dimensión que permite a Barcelona compararse con las metrópolis de base productiva. El País Vasco, en comparación nuestra, cuenta con un largo recorrido porque desde hace muchos años los diferentes niveles gubernamentales y de administración, junto con los empresarios, supieron hacer acuerdos y una apuesta clara por hacer un país industrial. Así pues, su economía hoy es más sólida porque lo es su industria. Mientras que nosotros tenemos por delante los retos de consolidar la innovación y la formación profesional, así como la ejecución y finalización de infraestructuras como es el Corredor Mediterráneo y la mejora de los polígonos, entre otros, que modernicen nuestra base industrial. Un horizonte que sólo alcanzaremos si compartimos la voluntad de la integración del hecho industrial en la realidad metropolitana, de forma que los servicios del centro de Barcelona no se vean ajenos a la realidad regional, sino formando parte del mismo proyecto.
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LA APUESTA POR LAS INFRAESTRUTURAS TECNOLÓGICAS
Por Josep Grau, consultor de estrategia y tecnología
La posición geoestratégica que Barcelona en el Mediterráneo le permite convertirse en un centro neurálgico para ser un importante punto de interconexión de cables submarinos en Europa. Barcelona Cable Landing Station (BCLS), liderado por la empresa catalana AFR-IX Telecom, está construyendo en Sant Adrià de Besòs la más grande infraestructura de cable submarino del Mediterráneo, una estación de aterrizaje de alta capacidad en Barcelona.
Esta infraestructura será la primera estación internacional de aterrizaje de cables submarinos construida en Cataluña, la instalación operará como gestor independiente en regimiento de alquiler. El modelo neutral, que explotará AFR-IX, es un modelo innovador de acceso abierto, que facilita la libre competencia entre los grandes operadores.
Barcelona CLS es la mejor alternativa frente a otras alternativas, como la que quiere ofrecer la nueva estación en la ciudad de Génova. La de Barcelona nos permitirá descongestionar el tráfico que pasa por Marsella. La infraestructura francesa da servicios a 10 cables submarinos y en proceso de obtener los permisos de aterrizaje de 12 más, por lo que es estratégico disponer de la estación de Barcelona.
El próximo año está previsto la entrada en funcionamiento en Barcelona de la Medusa Submarine Station, una nueva infraestructura de comunicación submarina que será referente en el Mediterráneo.
Un proyecto liderado también por la compañía AFR-IX, que desplegará desde la Barcelona Cable Landing Station, con una inversión de 326 millones de euros, financiado una parte por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) con 163 millones de euros.
Medusa será el cable submarino de fibra óptica más largo del Mediterráneo. Son unos 8.700 kilómetros, conectando nueve países de África y Europa, con puntos de aterrizaje en Portugal, Marruecos, España, Francia, Argelia, Túnez, Italia, Grecia y Egipto. El primer tramo de esta infraestructura será desplegada para la compañía Alcatel Submarine Networks y comenzará a funcionar en 2024 uniendo Barcelona con Lisboa y Marsella.
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TURISMO NUEVOS TERRITORIOS, MÁS GESTIÓN
Por Jordi William Carnes, Presidente de la Fundación KIMbcn
El nuevo reto en cuanto al turismo es la gestión. Coordinar oferta y demanda en una perspectiva amplia y transversal. Crear una cultura operativa requiere tiempo y determinados apriorismos ideológicos como el de «turista marcha a casa» no ayudan. Combinar la formación de los trabajadores y la estabilidad laboral que ayude a mejorar la calidad del destino junto a una coordinación cotidiana, práctica y operativa entre los actores públicos y privados es imprescindible, y esencial para dignificar a todos los actores. Para prestigiar una industria muy transversal. Sabemos que un cliente insatisfecho es una rémora para el destino por ello sería oportuna una redistribución diferente de las tasas turísticas, (las ofertas culturales y potenciar nuevos territorios con nuevas actividades son una oportunidad).
La sostenibilidad del turismo pasa por hacer de ésta una actividad resiliente, no estigmatizada. Que los actores públicos ayuden, no dificulten que las inversiones privadas generen infraestructuras más eficientes y eficaces. En la perspectiva de una economía circular y el desarrollo de la innovación tecnológica. Las moratorias sin un consenso territorial amplio generan dinámicas contradictorias.
Para generar un turismo de calidad y sostenible en el tiempo y territorio es necesario generar complicidades que erradiquen toda forma de incivismo e inseguridad. Es necesaria la gestión de ciertos cambios normativos para hacer fácil el cumplimiento de las legalidades vigentes.
Las buenas prácticas son la hoja de ruta para todos los actores, pero seamos sinceros, no podemos prescindir del turismo, con las capacidades laborales y formativas que tenemos, no tengamos miedo, ya que el turismo es una oportunidad. Sobran malas y especuladores, necesitamos buenos profesionales, y como dicen las «meigas» «haberlas las hay».
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LA INDUSTRIA EN LA REGIÓN METROPOLITANA DE BARCELONA
Núria Aymerich, Secretaría General del Gremio de Fabricantes de Sabadell
Hoy la región metropolitana de Barcelona tiene una industria sólida, cada vez más limpia y más sostenible, que ocupa conocimiento y crea oficios. Nos hacen falta programas formativos adaptables a las necesidades de las empresas con prácticas en el centro de trabajo y actualizar de forma ágil los programas formativos, en buena parte todavía pensados y ubicados en lugares que responden a las necesidades de otras épocas.
No somos una simple periferia de una capital global, somos la dimensión que permite a Barcelona compararse con las metrópolis de base productiva. El País Vasco, en comparación nuestra, cuenta con un largo recorrido porque desde hace muchos años los diferentes niveles gubernamentales y de administración, junto con los empresarios, supieron hacer acuerdos y una apuesta clara por hacer un país industrial. Así pues, su economía hoy es más sólida porque lo es su industria. Mientras que nosotros tenemos por delante los retos de consolidar la innovación y la formación profesional, así como la ejecución y finalización de infraestructuras como es el Corredor Mediterráneo y la mejora de los polígonos, entre otros, que modernicen nuestra base industrial. Un horizonte que sólo alcanzaremos si compartimos la voluntad de la integración del hecho industrial en la realidad metropolitana, de forma que los servicios del centro de Barcelona no se vean ajenos a la realidad regional, sino formando parte del mismo proyecto.
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