DAVID FERRER: «NO TINDREM UNA SOCIETAT DIGITAL SI NO DISPOSEM D’UNES BONES INFRAESTRUCTURES.»

El Secretari de Polítiques Digitals del Govern de Catalunya repassa els principals reptes que aborda Catalunya i Barcelona en matèria tecnològica

Por Josep Grau.

Una primera cuestión obligada: las competencias de la Secretaría son amplias, una es la Agencia de Ciberseguridad de Catalunya, que vela por garantizar la ciberseguridad de la Administración de la Generalitat e instituciones públicas. A primeros del mes de diciembre la Generalitat sufrió un importante ciberataque en su red de comunicaciones, así como otros ataques en la Universidad Autónoma de Barcelona y, en los últimos días, en la Universitat Oberta de Catalunya.
Es un placer poder explicar qué es y qué hace la Secretaría de Políticas Digitales del Govern de Catalunya (SPD). Sí, en el Govern nos ocupa y preocupa la ciberseguridad, y como bien dice, el pasado diciembre sufrimos un importante ciberataque, fue un ciberataque de “negación de servicio”. Hay varias tipologías, y en este caso consistió en bloquear el acceso a Internet de la Administración Publica, bloqueando nuestras capacidades de conectividad. Todavía estamos en un análisis forense y no puedo dar detalles por confidencialidad, pero es altamente sospechoso que el ciberataque se produjera la tarde de un día de puente. Todos los ataques han intentado cogernos con la guardia baja, en este caso fue un ataque dirigido a la Generalitat orientado sobre todo a los servicios de Salut, un importante ataque que recuperaron en tres horas, fue similar al sufrido por el 9N, pero en ese caso tardamos unos tres días en recuperarlo. Fue un ataque en dos olas que, gracias a la Agencia de Ciberseguridad y la coordinación del CTTI con Telefónica, operador del que atacaron los accesos, se resolvió. Telefónica nos comentó que fue el ciberataque más importante a nivel estatal este año.
Cabe mencionar que los recursos para movilizar estos ciberataques son decenas de miles de euros, no es la primera vez ni será la última. La Agencia tiene la tarea de proteger el perímetro de los servicios públicos de Catalunya. De hecho, este enero se pone en marcha un despliegue de protección mediante una prueba piloto (PP) con 50 Ayuntamientos, a la que, una vez afinadas las cuestiones técnicas, podrán adherirse todos los Ayuntamientos que lo soliciten.
La ciberseguridad es un negocio que moviliza mucho dinero, mucho más que el negocio de la droga a nivel mundial, por eso, el Govern seguirá dedicando recursos para estar bien preparados. Otra tipología son los ataques del tipo Phishing o por Ransomware, que fue el que sufrió la Universitat Autònoma, en el que la Agencia de Ciberseguridad colaboró en la resolución, y por suerte no fue a más. De todos modos costará recuperar la normalidad. Esto demuestra la importancia de estar bien preparados e invertir para que nos permitan recuperar lo más rápido posible los servicios cuando se produzcan estos ciberataques.

Volvamos a las competencias de la Secretaría de Políticas Digitales (SPD).
Tenemos amplias competencias, pero no las que desearíamos, porque, volviendo a la ciberseguridad, cuando se creó la Agencia, sus competencias fueron impugnadas en el Tribunal Constitucional (TC), aunque prácticamente nos dio la razón, pero no en lo que se refiere a competencias en acciones de contraataque. Si hacemos el símil del boxeo, podemos recibir golpes y repelerlos, pero no podemos dar contragolpes.
Dentro de nuestras competencias existen aspectos que usted conoce bien, que hacen referencia al sector de las telecomunicaciones. No las tenemos por el ordenamiento del espectro radioeléctrico, ni de coordinación con el propio sector. En este sentido, poner de relieve que, en la tramitación de la nueva Ley General de Telecomunicaciones (LGT) en el Congreso de Diputados, que profundiza aún más con la centralización de competencias, existe una desconfianza ante el hecho que las regiones podamos participar en garantizar la conectividad a todos los ciudadanos para conseguir lo que se llama Gigabit Society.
Respecto a la conectividad, no podemos incidir en la mejora de la conectividad en movilidad, no podemos ni obligar ni actuar para mejorar este tipo de servicios. Si que, dentro de nuestras competencias, podemos actuar en el despliegue de infraestructuras fijas en el territorio, pero actuar con el sector se nos hace muy complicado. Un aspecto importante es disponer de información de las infraestructuras que tienen los operadores en el territorio, una información que debería ser transparente para todas las administraciones. No puede ser, cuando requerimos información a la Comisión Nacional del Mercado y de la Competencia (CNMC), que no se nos dé alegando criterios de confidencialidad.

El Plan Estratégico de Infraestructuras Digitales (PEID) se aprobó por acuerdo de Gobierno el pasado mes de octubre. ¿Cuáles son sus ejes estratégicos y líneas de actuación?
El PEID es una visión estratégica, integral, transversal y holística de la planificación de las infraestructuras digitales en Catalunya. Las infraestructuras son el elemento nuclear de la sociedad digital, no tendremos una sociedad digital si no disponemos de buenas infraestructuras.
Lo hemos visto con la emergencia del COVID: un día para otro pusimos presión y estresamos las infraestructuras, que afortunadamente respondieron. Pero evidentemente el incremento de la demanda, tráfico, y los servicios son cada vez más críticos.
Es necesario planificar el despliegue y capacidades de las infraestructuras para disponer de una base sólida y robusta. El PEID nos permite la ordenación y planificación de las infraestructuras e impulsarlas con garantías para tener una buena conectividad universal en el territorio. Infraestructuras que el Gobierno pone al alcance de cualquier operador del mercado, a precios públicos y sin afectar al normal funcionamiento de la competencia.
El Plan tiene varias miradas, las infraestructuras de conectividad fija mediante la fibra óptica, y las infraestructuras físicas para la movilidad, la cobertura de la RTV pública, cobertura y capacidades de los servicios de emergencia, y por el control de tráfico. Además, el despliegue de las infraestructuras para el almacenamiento y computación cada vez que servicios como los sanitarios y/o educativos requieran de infraestructuras en el territorio distribuidas y de proximidad. Son las llamadas “Edge Computing”.

La SPD ha definido y participado en el programa New Space, que impulsa esta estrategia e intervención del Gobierno. ¿Es eso, Secretario, una estructura de Estado?
No diría que es una estructura de Estado, es más bien una política de Estado. El Plan New Space contempla desplegar infraestructuras de alta relevancia estratégica y económica, como el Space Port d’Alguaire, espacio del Montsec y otra serie de espacios. En el Plan una de las dimensiones son las infraestructuras, pero no es la única, aunque sea la más visible. Este Plan trata de impulsar una infraestructura satelital que permita desplegar servicios de gran valor. Nuestra posición es impulsar un sector emergente. Esto lo hacen otros gobiernos con toda normalidad, y creemos que nos corresponde hacerlo.

El New Space es un concepto para la democratización del Espacio. Hace unos años este sector estaba reservado a las grandes Agencias y Empresas Estatales que impulsaban grandes proyectos de cientos de miles de millones de euros, dedicados a misiones principalmente científicas y de investigación. El New Space permite que empresas, gobiernos y regiones también puedan desarrollar proyectos que utilicen tecnologías más estándar. Estas tecnologías se despliegan en órbitas mucho más bajas (entre 500 y 2.000Km) con un coste de lanzamiento mucho más asequible y un ciclo de vida más bajo. Esto nos permite desarrollar la tecnología, desplegarla, lanzarla, utilizarla, en un ciclo de vida de cinco años, provocando una aceleración tecnológica enorme y una convergencia digital más rápida. Son tecnológicas más innovadoras respecto a los años 80. En definitiva, son una pieza estratégica de las políticas que el Govern impulsa.

Empezamos con la estrategia 5G en Catalunya. Después el Blockchain. Aprobamos la estrategia para la inteligencia artificial, aprobamos la estrategia New Space, y esperamos aprobar en el mismo año la estrategia del Govern en tecnologías cuánticas, creando una comisión que presidirá Andreu Mas-Cullell con la participación del Instituto de Ciencias Fotónicas. Todas estas tecnologías confluyen en el sector New Space. Es un sector estratégico y de crecimiento, donde el Govern se permite posicionarse con liderazgo. Es una oportunidad y tenemos capacidades, tenemos un interesante ecosistema de industrias y centros tecnológicos. Se nos acercan empresas para establecerse en Catalunya y desarrollar aquí esta actividad. El programa de inversión del Govern para este 2022 es de 8M€, la configuración presupuestaria del Plan es de 15M€ para 2020-2023, pero estamos cerrando un acuerdo de “open constellation” por valor de 25M€, llegando a un total de 40M€ con la participación de empresas innovadoras que se pueden desarrollar aquí en Catalunya.

¿En qué tipo de regulación se sustentan estas iniciativas?
La regulación por este tipo de despliegues de baja órbita no está regulado por los Estados, sino por la ITU (Unión Internacional de Telecomunicaciones) y organismos internacionales que gobiernan, ordenan y controlan el espacio y a qué órbitas posicionarse para evitar colisiones. Recientemente la Estación Espacial Internacional tenía previsto un lanzamiento para intercambiar tripulación que fue cancelado por el riesgo de colisión con objetos que orbitaban alrededor de la Tierra. Tenemos que pensar que hay cientos de miles de cuerpos orbitando. Es un problema que requiere un exhaustivo control. Existen misiones para retirar objetos obsoletos, es un espacio finito.

Otra iniciativa, la Barcelona Cable Landing Station (BCLS), donde la empresa catalana AFR-IX ha iniciado la construcción de un punto de llegada internacional de cables submarinos en Sant Adrià de Besòs, es una infraestructura de conectividad de alta capacidad en Barcelona. ¿Qué intervención y qué inversiones ha comprometido el Govern?
Nosotros hemos tenido una intervención desde el primer momento para que se materializara a partir de la iniciativa de esta empresa. Nuestro objetivo es mejorar la conectividad internacional de Catalunya. Más del 90% del tráfico internacional en Internet se vehicula por sistemas de cable submarino. Si nos fijamos con el mapa de acceso, las infraestructuras son una gran «anomalía» en Catalunya y en España, no estamos bien conectados. El único cable submarino que existe en España es el MAREA, un cable que va de Bilbao a Virginia Beach (EEUU), un consorcio de compañías como Telsius, Microsoft y Facebook. Google ha anunciado la construcción de una nueva infraestructura que también irá de Bilbao a EEUU. El Govern, aprovechando nuestra posición geoestratégica en el Mediterráneo, quiere incidir en ese ámbito. Si miramos el mapa, todos los sistemas de cable submarino que vienen de África, Asia-Pacífico o Europa Oriental, atraviesan el Mediterráneo y aterrizan en Marsella o por el estrecho en Lisboa.
Por diferentes motivos entendimos que Catalunya tenía que disponer de unas condiciones de conectividad internacionales mucho más competitivas, poniendo a Barcelona en una posición en el mapa internacional. En este sentido, acordamos con esta compañía un plan de inversiones para construir una Landing Station, con la condición de que aplique los criterios de Open-Port, que significa ofrecer, en condiciones equivalentes, a todos los operadores. Se ha otorgado una concesión marítimo-terrestre por 50 años hasta ocho sistemas. Nuestra intervención ha sido la de tramitar una concesión con todas las garantías, requisitos administrativos y ambientales.
A lo que si nos hemos comprometido es a extender infraestructuras de acceso a los Data Centers de Catalunya, mediante un primer anillo aprovechando las Rondas de Barcelona para llegar al Carrier House de la Zona Franca y, en una segunda fase, un anillo metropolitano Besòs-Llobregat pasando por el Parque de Alba, con varios accesos en el recorrido metropolitano.
Además, estamos trabajando en un plan de ordenación y planificación marítimo-terrestre del espacio mediterráneo catalán por si otro operador tiene interés; así podemos dar respuesta a otra iniciativa de Puerto en nuestra costa.

Es evidente que el sector tecnológico es un sector estratégico de crecimiento y de creación de empleo en Catalunya y, en concreto, en la región metropolitana. El último Observatorio indica que este sector representa casi el 10% del PIB catalán, pero tenemos un problema importante: la falta de talento digital.
Uno de los pilares de la sociedad digital son las infraestructuras y otro pilar imprescindible es el talento. Tenemos un gran reto en la carencia de talento, pero es un problema global. Tenemos más necesidad de talento digital que capacidad de generarlo. En este sentido estamos trabajando en un programa con las Universidades y con el sector que espero poder anunciar en breve, pero no es una cuestión que se pueda resolver únicamente desde el Govern.
El peso del sector tecnológico en el PIB catalán, como dice, es casi del 10%, en la última EPA se indica que tenemos más de 130.000 profesionales ocupados, un sector en el que el nivel de retribución está por encima del 20% de la media, que en los últimos cinco años ha crecido el empleo un 50%, cuando en otros sectores la media no ha alcanzado al 4%. Por lo tanto, es un sector con gran crecimiento, pero lamentablemente nos faltan profesionales. Un reciente estudio cuantificaba las necesidades en Catalunya en 60.000 profesionales. El Digital Hub anunció que la multinacional Pepsico en Barcelona requiere contratar a 400 ingenieros para llegar a 1.000. Son cifras importantes a las que no será fácil dar respuesta.

Centrémonos ahora en la gran Barcelona, una metrópoli con 5,5M de ciudadanos que agrupa a las ciudades más pobladas y más industriales de Catalunya. ¿Cree que se dispone de buenas infraestructuras?
Una cosa es tener buenas infraestructuras y, otra, tenerlas de buena calidad. No voy a entrar en valorar la calidad del servicio, que evidentemente siempre es mejorable, pero hay que ser exigentes con los proveedores de conectividad. Más allá de esto, los datos que tenemos del área metropolitana de Barcelona nos muestran que tenemos unas buenas infraestructuras, aunque si hablamos de fibra óptica o movilidad es cierto que todavía tenemos algunos núcleos de población y zonas de actividad económica con deficiencias.
Aplicando la metodología del DESI, que es el estudio con el que cada año la Unión Europea analiza el índice de desarrollo de la sociedad de la información aplicado en Catalunya, nosotros analizamos hace dos años qué nota pasaría este examen del DESI. Y salimos con buena nota: seríamos el 5º Estado a nivel europeo detrás de los nórdicos. Y, si nos fijamos en el nivel de infraestructuras, estaríamos en los primeros puestos. Habrá que ver en el DESI 21, sin embargo, que publicaremos este año, qué impacto habrá tenido la COVID.

Hablemos ahora de 5G. La tecnología 5G permite unas funcionalidades muy potentes. Una tecnología que aporta valor en sectores como industria, automoción, logística, salud, seguridad y emergencias, etc… En este sentido, en algunos países de Europa, como Alemania, Francia o Reino Unido, y también en EEUU, los reguladores contemplan la adjudicación de espectro para redes privadas en las regiones industriales.
Bien, esto nos lleva de nuevo a las competencias, es una decisión política. Nosotros únicamente tenemos opinión. Trasladamos a la Secretaría de Estado la necesidad de que contemplaran en el otorgamiento de las licencias que aplican varias bandas de frecuencias, donde cada una tiene una función, capacidades y cobertura diferente. Nosotros creemos que la mejor banda eran los 3,5M€. En este sentido el Estado manifiesta voluntades, pero que la banda seguramente será la de 26Ghz, que comportará mayor complejidad. Lo más importante es que se permitirá a compañías industriales y logísticas disponer de espectro para poder desplegar con seguridad la Industria 4.0. Las empresas consideramos que las infraestructuras 5G son estratégicas, y por lo tanto es lógico que las quieran propias. En sus planes de digitalización es crítico tener el control y la titularidad de la frecuencia.

Bien, casi la última cuestión. Ni en Europa, a excepción de Alemania, ni evidentemente aquí, ni diseñamos ni fabricamos microprocesadores. El mercado está dominado por empresas americanas y asiáticas. Es evidente la clara dependencia que condiciona la producción industrial. Hemos visto industrias paralizar su producción por carencia de microprocesadores.
El tema de los semiconductores es muy complejo, es un tema que conozco suficientemente bien. No es lo mismo hablar de tecnologías de 60 nm que de 100. El proyecto del chip europeo, en el que participa el Barcelona Computer Center (BCC), es de 6nm y de carácter muy específico.
Europa se ha dado cuenta demasiado tarde que la industria de los semiconductores es estratégica y ya ha asumido no tener soberanía tecnológica en ese ámbito. Carecer de industria en este ámbito es un gran error. Nosotros, como decía, llevamos trabajando hace tiempo, para determinar nuestro posicionamiento. Las inversiones, dependiendo de la tecnología, son estratosféricas distintas. Un ejemplo: una planta de producción del chip europeo comporta inversiones de 10mM€ con unas necesidades de espacio, energía y agua inasumibles en Catalunya. INTEL hará una inversión por una planta de producción en Alemania, donde el Gobierno Alemán pondrá unos 10mM€, y eso sólo ocurrirá en Alemania.
Una vez analizado y muy contrastado, concluimos que en Cataluña no tenemos las capacidades de producción. Otro aspecto sería en el diseño, a partir del proyecto europeo, donde podemos desarrollar ciertas capacidades. Estamos trabajando en un proyecto con una compañía para poder tener una pequeña planta de producción de chips para la industria.

Ligada con ésta, hay dos grandes tendencias tecnológicas: una liderada por EEUU (Zona América) centrada más el diseño de tecnologías, software y en redes sociales, y una segunda en Asia-Pacífico liderada por China y los países asiáticos, centrada en el hardware. Europa no acaba de definir qué espacio ocupar y qué ámbito liderar, quizás, por la tipología de sociedad, quizás serie en el gobierno de los datos.
Sí, existen dos grandes ejes, el primero hace referencia a las tecnologías vinculadas al hardware, y, el otro, a las tecnologías más vinculadas al Software. Asia, a nivel de producción de semiconductores, es una gran potencia, pero quienes tienen realmente la tecnología y capacidades del diseño son los americanos. Y si hablamos del 5G, EE.UU. son los líderes.
Si tenemos en cuenta las tensiones geopolíticas globales, el liderazgo mundial está virando hacia Asia-Pacífico, por ejemplo en tecnologías de inteligencia artificial o tecnologías 5G. En este sentido, Europa parece no acabar de encontrar su posición. Personalmente creo que debería apostar por el control y protección de los datos, puesto que Europa tiene modelos de gobernanza mucho más garantistas por la economía de los datos.

Por Josep Grau.

Una primera cuestión obligada: las competencias de la Secretaría son amplias, una es la Agencia de Ciberseguridad de Catalunya, que vela por garantizar la ciberseguridad de la Administración de la Generalitat e instituciones públicas. A primeros del mes de diciembre la Generalitat sufrió un importante ciberataque en su red de comunicaciones, así como otros ataques en la Universidad Autónoma de Barcelona y, en los últimos días, en la Universitat Oberta de Catalunya.
Es un placer poder explicar qué es y qué hace la Secretaría de Políticas Digitales del Govern de Catalunya (SPD). Sí, en el Govern nos ocupa y preocupa la ciberseguridad, y como bien dice, el pasado diciembre sufrimos un importante ciberataque, fue un ciberataque de “negación de servicio”. Hay varias tipologías, y en este caso consistió en bloquear el acceso a Internet de la Administración Publica, bloqueando nuestras capacidades de conectividad. Todavía estamos en un análisis forense y no puedo dar detalles por confidencialidad, pero es altamente sospechoso que el ciberataque se produjera la tarde de un día de puente. Todos los ataques han intentado cogernos con la guardia baja, en este caso fue un ataque dirigido a la Generalitat orientado sobre todo a los servicios de Salut, un importante ataque que recuperaron en tres horas, fue similar al sufrido por el 9N, pero en ese caso tardamos unos tres días en recuperarlo. Fue un ataque en dos olas que, gracias a la Agencia de Ciberseguridad y la coordinación del CTTI con Telefónica, operador del que atacaron los accesos, se resolvió. Telefónica nos comentó que fue el ciberataque más importante a nivel estatal este año.
Cabe mencionar que los recursos para movilizar estos ciberataques son decenas de miles de euros, no es la primera vez ni será la última. La Agencia tiene la tarea de proteger el perímetro de los servicios públicos de Catalunya. De hecho, este enero se pone en marcha un despliegue de protección mediante una prueba piloto (PP) con 50 Ayuntamientos, a la que, una vez afinadas las cuestiones técnicas, podrán adherirse todos los Ayuntamientos que lo soliciten.
La ciberseguridad es un negocio que moviliza mucho dinero, mucho más que el negocio de la droga a nivel mundial, por eso, el Govern seguirá dedicando recursos para estar bien preparados. Otra tipología son los ataques del tipo Phishing o por Ransomware, que fue el que sufrió la Universitat Autònoma, en el que la Agencia de Ciberseguridad colaboró en la resolución, y por suerte no fue a más. De todos modos costará recuperar la normalidad. Esto demuestra la importancia de estar bien preparados e invertir para que nos permitan recuperar lo más rápido posible los servicios cuando se produzcan estos ciberataques.

Volvamos a las competencias de la Secretaría de Políticas Digitales (SPD).
Tenemos amplias competencias, pero no las que desearíamos, porque, volviendo a la ciberseguridad, cuando se creó la Agencia, sus competencias fueron impugnadas en el Tribunal Constitucional (TC), aunque prácticamente nos dio la razón, pero no en lo que se refiere a competencias en acciones de contraataque. Si hacemos el símil del boxeo, podemos recibir golpes y repelerlos, pero no podemos dar contragolpes.
Dentro de nuestras competencias existen aspectos que usted conoce bien, que hacen referencia al sector de las telecomunicaciones. No las tenemos por el ordenamiento del espectro radioeléctrico, ni de coordinación con el propio sector. En este sentido, poner de relieve que, en la tramitación de la nueva Ley General de Telecomunicaciones (LGT) en el Congreso de Diputados, que profundiza aún más con la centralización de competencias, existe una desconfianza ante el hecho que las regiones podamos participar en garantizar la conectividad a todos los ciudadanos para conseguir lo que se llama Gigabit Society.
Respecto a la conectividad, no podemos incidir en la mejora de la conectividad en movilidad, no podemos ni obligar ni actuar para mejorar este tipo de servicios. Si que, dentro de nuestras competencias, podemos actuar en el despliegue de infraestructuras fijas en el territorio, pero actuar con el sector se nos hace muy complicado. Un aspecto importante es disponer de información de las infraestructuras que tienen los operadores en el territorio, una información que debería ser transparente para todas las administraciones. No puede ser, cuando requerimos información a la Comisión Nacional del Mercado y de la Competencia (CNMC), que no se nos dé alegando criterios de confidencialidad.

El Plan Estratégico de Infraestructuras Digitales (PEID) se aprobó por acuerdo de Gobierno el pasado mes de octubre. ¿Cuáles son sus ejes estratégicos y líneas de actuación?
El PEID es una visión estratégica, integral, transversal y holística de la planificación de las infraestructuras digitales en Catalunya. Las infraestructuras son el elemento nuclear de la sociedad digital, no tendremos una sociedad digital si no disponemos de buenas infraestructuras.
Lo hemos visto con la emergencia del COVID: un día para otro pusimos presión y estresamos las infraestructuras, que afortunadamente respondieron. Pero evidentemente el incremento de la demanda, tráfico, y los servicios son cada vez más críticos.
Es necesario planificar el despliegue y capacidades de las infraestructuras para disponer de una base sólida y robusta. El PEID nos permite la ordenación y planificación de las infraestructuras e impulsarlas con garantías para tener una buena conectividad universal en el territorio. Infraestructuras que el Gobierno pone al alcance de cualquier operador del mercado, a precios públicos y sin afectar al normal funcionamiento de la competencia.
El Plan tiene varias miradas, las infraestructuras de conectividad fija mediante la fibra óptica, y las infraestructuras físicas para la movilidad, la cobertura de la RTV pública, cobertura y capacidades de los servicios de emergencia, y por el control de tráfico. Además, el despliegue de las infraestructuras para el almacenamiento y computación cada vez que servicios como los sanitarios y/o educativos requieran de infraestructuras en el territorio distribuidas y de proximidad. Son las llamadas “Edge Computing”.

La SPD ha definido y participado en el programa New Space, que impulsa esta estrategia e intervención del Gobierno. ¿Es eso, Secretario, una estructura de Estado?
No diría que es una estructura de Estado, es más bien una política de Estado. El Plan New Space contempla desplegar infraestructuras de alta relevancia estratégica y económica, como el Space Port d’Alguaire, espacio del Montsec y otra serie de espacios. En el Plan una de las dimensiones son las infraestructuras, pero no es la única, aunque sea la más visible. Este Plan trata de impulsar una infraestructura satelital que permita desplegar servicios de gran valor. Nuestra posición es impulsar un sector emergente. Esto lo hacen otros gobiernos con toda normalidad, y creemos que nos corresponde hacerlo.

El New Space es un concepto para la democratización del Espacio. Hace unos años este sector estaba reservado a las grandes Agencias y Empresas Estatales que impulsaban grandes proyectos de cientos de miles de millones de euros, dedicados a misiones principalmente científicas y de investigación. El New Space permite que empresas, gobiernos y regiones también puedan desarrollar proyectos que utilicen tecnologías más estándar. Estas tecnologías se despliegan en órbitas mucho más bajas (entre 500 y 2.000Km) con un coste de lanzamiento mucho más asequible y un ciclo de vida más bajo. Esto nos permite desarrollar la tecnología, desplegarla, lanzarla, utilizarla, en un ciclo de vida de cinco años, provocando una aceleración tecnológica enorme y una convergencia digital más rápida. Son tecnológicas más innovadoras respecto a los años 80. En definitiva, son una pieza estratégica de las políticas que el Govern impulsa.

Empezamos con la estrategia 5G en Catalunya. Después el Blockchain. Aprobamos la estrategia para la inteligencia artificial, aprobamos la estrategia New Space, y esperamos aprobar en el mismo año la estrategia del Govern en tecnologías cuánticas, creando una comisión que presidirá Andreu Mas-Cullell con la participación del Instituto de Ciencias Fotónicas. Todas estas tecnologías confluyen en el sector New Space. Es un sector estratégico y de crecimiento, donde el Govern se permite posicionarse con liderazgo. Es una oportunidad y tenemos capacidades, tenemos un interesante ecosistema de industrias y centros tecnológicos. Se nos acercan empresas para establecerse en Catalunya y desarrollar aquí esta actividad. El programa de inversión del Govern para este 2022 es de 8M€, la configuración presupuestaria del Plan es de 15M€ para 2020-2023, pero estamos cerrando un acuerdo de “open constellation” por valor de 25M€, llegando a un total de 40M€ con la participación de empresas innovadoras que se pueden desarrollar aquí en Catalunya.

¿En qué tipo de regulación se sustentan estas iniciativas?
La regulación por este tipo de despliegues de baja órbita no está regulado por los Estados, sino por la ITU (Unión Internacional de Telecomunicaciones) y organismos internacionales que gobiernan, ordenan y controlan el espacio y a qué órbitas posicionarse para evitar colisiones. Recientemente la Estación Espacial Internacional tenía previsto un lanzamiento para intercambiar tripulación que fue cancelado por el riesgo de colisión con objetos que orbitaban alrededor de la Tierra. Tenemos que pensar que hay cientos de miles de cuerpos orbitando. Es un problema que requiere un exhaustivo control. Existen misiones para retirar objetos obsoletos, es un espacio finito.

Otra iniciativa, la Barcelona Cable Landing Station (BCLS), donde la empresa catalana AFR-IX ha iniciado la construcción de un punto de llegada internacional de cables submarinos en Sant Adrià de Besòs, es una infraestructura de conectividad de alta capacidad en Barcelona. ¿Qué intervención y qué inversiones ha comprometido el Govern?
Nosotros hemos tenido una intervención desde el primer momento para que se materializara a partir de la iniciativa de esta empresa. Nuestro objetivo es mejorar la conectividad internacional de Catalunya. Más del 90% del tráfico internacional en Internet se vehicula por sistemas de cable submarino. Si nos fijamos con el mapa de acceso, las infraestructuras son una gran «anomalía» en Catalunya y en España, no estamos bien conectados. El único cable submarino que existe en España es el MAREA, un cable que va de Bilbao a Virginia Beach (EEUU), un consorcio de compañías como Telsius, Microsoft y Facebook. Google ha anunciado la construcción de una nueva infraestructura que también irá de Bilbao a EEUU. El Govern, aprovechando nuestra posición geoestratégica en el Mediterráneo, quiere incidir en ese ámbito. Si miramos el mapa, todos los sistemas de cable submarino que vienen de África, Asia-Pacífico o Europa Oriental, atraviesan el Mediterráneo y aterrizan en Marsella o por el estrecho en Lisboa.
Por diferentes motivos entendimos que Catalunya tenía que disponer de unas condiciones de conectividad internacionales mucho más competitivas, poniendo a Barcelona en una posición en el mapa internacional. En este sentido, acordamos con esta compañía un plan de inversiones para construir una Landing Station, con la condición de que aplique los criterios de Open-Port, que significa ofrecer, en condiciones equivalentes, a todos los operadores. Se ha otorgado una concesión marítimo-terrestre por 50 años hasta ocho sistemas. Nuestra intervención ha sido la de tramitar una concesión con todas las garantías, requisitos administrativos y ambientales.
A lo que si nos hemos comprometido es a extender infraestructuras de acceso a los Data Centers de Catalunya, mediante un primer anillo aprovechando las Rondas de Barcelona para llegar al Carrier House de la Zona Franca y, en una segunda fase, un anillo metropolitano Besòs-Llobregat pasando por el Parque de Alba, con varios accesos en el recorrido metropolitano.
Además, estamos trabajando en un plan de ordenación y planificación marítimo-terrestre del espacio mediterráneo catalán por si otro operador tiene interés; así podemos dar respuesta a otra iniciativa de Puerto en nuestra costa.

Es evidente que el sector tecnológico es un sector estratégico de crecimiento y de creación de empleo en Catalunya y, en concreto, en la región metropolitana. El último Observatorio indica que este sector representa casi el 10% del PIB catalán, pero tenemos un problema importante: la falta de talento digital.
Uno de los pilares de la sociedad digital son las infraestructuras y otro pilar imprescindible es el talento. Tenemos un gran reto en la carencia de talento, pero es un problema global. Tenemos más necesidad de talento digital que capacidad de generarlo. En este sentido estamos trabajando en un programa con las Universidades y con el sector que espero poder anunciar en breve, pero no es una cuestión que se pueda resolver únicamente desde el Govern.
El peso del sector tecnológico en el PIB catalán, como dice, es casi del 10%, en la última EPA se indica que tenemos más de 130.000 profesionales ocupados, un sector en el que el nivel de retribución está por encima del 20% de la media, que en los últimos cinco años ha crecido el empleo un 50%, cuando en otros sectores la media no ha alcanzado al 4%. Por lo tanto, es un sector con gran crecimiento, pero lamentablemente nos faltan profesionales. Un reciente estudio cuantificaba las necesidades en Catalunya en 60.000 profesionales. El Digital Hub anunció que la multinacional Pepsico en Barcelona requiere contratar a 400 ingenieros para llegar a 1.000. Son cifras importantes a las que no será fácil dar respuesta.

Centrémonos ahora en la gran Barcelona, una metrópoli con 5,5M de ciudadanos que agrupa a las ciudades más pobladas y más industriales de Catalunya. ¿Cree que se dispone de buenas infraestructuras?
Una cosa es tener buenas infraestructuras y, otra, tenerlas de buena calidad. No voy a entrar en valorar la calidad del servicio, que evidentemente siempre es mejorable, pero hay que ser exigentes con los proveedores de conectividad. Más allá de esto, los datos que tenemos del área metropolitana de Barcelona nos muestran que tenemos unas buenas infraestructuras, aunque si hablamos de fibra óptica o movilidad es cierto que todavía tenemos algunos núcleos de población y zonas de actividad económica con deficiencias.
Aplicando la metodología del DESI, que es el estudio con el que cada año la Unión Europea analiza el índice de desarrollo de la sociedad de la información aplicado en Catalunya, nosotros analizamos hace dos años qué nota pasaría este examen del DESI. Y salimos con buena nota: seríamos el 5º Estado a nivel europeo detrás de los nórdicos. Y, si nos fijamos en el nivel de infraestructuras, estaríamos en los primeros puestos. Habrá que ver en el DESI 21, sin embargo, que publicaremos este año, qué impacto habrá tenido la COVID.

Hablemos ahora de 5G. La tecnología 5G permite unas funcionalidades muy potentes. Una tecnología que aporta valor en sectores como industria, automoción, logística, salud, seguridad y emergencias, etc… En este sentido, en algunos países de Europa, como Alemania, Francia o Reino Unido, y también en EEUU, los reguladores contemplan la adjudicación de espectro para redes privadas en las regiones industriales.
Bien, esto nos lleva de nuevo a las competencias, es una decisión política. Nosotros únicamente tenemos opinión. Trasladamos a la Secretaría de Estado la necesidad de que contemplaran en el otorgamiento de las licencias que aplican varias bandas de frecuencias, donde cada una tiene una función, capacidades y cobertura diferente. Nosotros creemos que la mejor banda eran los 3,5M€. En este sentido el Estado manifiesta voluntades, pero que la banda seguramente será la de 26Ghz, que comportará mayor complejidad. Lo más importante es que se permitirá a compañías industriales y logísticas disponer de espectro para poder desplegar con seguridad la Industria 4.0. Las empresas consideramos que las infraestructuras 5G son estratégicas, y por lo tanto es lógico que las quieran propias. En sus planes de digitalización es crítico tener el control y la titularidad de la frecuencia.

Bien, casi la última cuestión. Ni en Europa, a excepción de Alemania, ni evidentemente aquí, ni diseñamos ni fabricamos microprocesadores. El mercado está dominado por empresas americanas y asiáticas. Es evidente la clara dependencia que condiciona la producción industrial. Hemos visto industrias paralizar su producción por carencia de microprocesadores.
El tema de los semiconductores es muy complejo, es un tema que conozco suficientemente bien. No es lo mismo hablar de tecnologías de 60 nm que de 100. El proyecto del chip europeo, en el que participa el Barcelona Computer Center (BCC), es de 6nm y de carácter muy específico.
Europa se ha dado cuenta demasiado tarde que la industria de los semiconductores es estratégica y ya ha asumido no tener soberanía tecnológica en ese ámbito. Carecer de industria en este ámbito es un gran error. Nosotros, como decía, llevamos trabajando hace tiempo, para determinar nuestro posicionamiento. Las inversiones, dependiendo de la tecnología, son estratosféricas distintas. Un ejemplo: una planta de producción del chip europeo comporta inversiones de 10mM€ con unas necesidades de espacio, energía y agua inasumibles en Catalunya. INTEL hará una inversión por una planta de producción en Alemania, donde el Gobierno Alemán pondrá unos 10mM€, y eso sólo ocurrirá en Alemania.
Una vez analizado y muy contrastado, concluimos que en Cataluña no tenemos las capacidades de producción. Otro aspecto sería en el diseño, a partir del proyecto europeo, donde podemos desarrollar ciertas capacidades. Estamos trabajando en un proyecto con una compañía para poder tener una pequeña planta de producción de chips para la industria.

Ligada con ésta, hay dos grandes tendencias tecnológicas: una liderada por EEUU (Zona América) centrada más el diseño de tecnologías, software y en redes sociales, y una segunda en Asia-Pacífico liderada por China y los países asiáticos, centrada en el hardware. Europa no acaba de definir qué espacio ocupar y qué ámbito liderar, quizás, por la tipología de sociedad, quizás serie en el gobierno de los datos.
Sí, existen dos grandes ejes, el primero hace referencia a las tecnologías vinculadas al hardware, y, el otro, a las tecnologías más vinculadas al Software. Asia, a nivel de producción de semiconductores, es una gran potencia, pero quienes tienen realmente la tecnología y capacidades del diseño son los americanos. Y si hablamos del 5G, EE.UU. son los líderes.
Si tenemos en cuenta las tensiones geopolíticas globales, el liderazgo mundial está virando hacia Asia-Pacífico, por ejemplo en tecnologías de inteligencia artificial o tecnologías 5G. En este sentido, Europa parece no acabar de encontrar su posición. Personalmente creo que debería apostar por el control y protección de los datos, puesto que Europa tiene modelos de gobernanza mucho más garantistas por la economía de los datos.

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